“Como arena, el silencio sepultará las casas.
Como arena, las casas se desmoronarán.
Oigo ya sus lamentos. Solitarios. Sombríos.
Ahogados por el viento y la vegetación”.
La lluvia amarilla / Julio Llamazares
El anciano protagonista de La lluvia amarilla lo relata del siguiente modo: “El proceso de destrucción siempre era el mismo, e igual de irreparable, en cada casa. El moho y la humedad roían en silencio, primero, las paredes, más tarde, los tejados, y, luego ya, como si de una lenta lepra se tratara, el esqueleto descarnado de las vigas en que aquellos se apoyaban. Después, aparecían los líquenes silvestres, las negras garras muertas del musgo y la carcoma, y, al fin, cuando la casa entera estaba ya podrida hasta sus últimas sustancias, el viento o una nevada acababan arrumbándola”
Como ya decíamos en anteriores entradas del blog que han tratado este mismo asunto, desgraciadamente este ejemplo se repite en cualquier lugar al que vayamos, y hoy traemos al blog fotos de una casa abandonada, que he podido tomar durante la realización de una ruta de senderismo, cerca de la Sierra de la Martela (Segura de León) el pasado dia 26-3
Hoy ha sido Segura de León, pero en cualquier lugar de la zona nos podemos encontrar el mismo fenómeno.
Enhorabuena Jesús, ya has superado el millón de visitas, ahora a seguir a por los 2 mill. Buen trabajo. Un fuerte abrazo: Pepe
ResponderEliminarMuchas gracias amigo Pepe. Un fuerte abrazo
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