Desde el treinta de agosto y hasta el ocho de septiembre se celebra una de las fiestas más antiguas y genuinas de Fregenal de la Sierra, las Fiestas en Honor a la Virgen de la Salud.
De ella destaca un grupo de danzantes conocidos popularmente como los Danzaores de la Virgen de la Salud que engalanados con una atractiva indumentaria protagonizan una antigua y llamativa danza ritual.
La Danza: De origen desconocido la danza está incluida en las denominadas danzas guerreras, de paloteo, agrarias y de fertilidad. Conocida como Danza de la Virgen de la Salud se encuentra su primera referencia histórica en el siglo XVIII, aunque se estima que es muy anterior a esta fecha.
Desde el punto de vista musical, se diferencian cuatro apartados: Pasacalles, Rosario, Alborada y Danza.
Los Danzaores: El grupo está formado por nueve danzantes, todos hombres, vestidos de cintas de color rojo, que son dirigidos por uno de ellos a quien llaman guión y que se diferencia del resto por las cintas de color verde que adornan su traje.
Las vestimentas que lucen son tan llamativas como su propia danza: medias, faldas almidonadas, banderolas que atraviesan el pecho y la espalda, pañuelos y tocados de flores resumen la apariencia de esta genuina danza ritual.
El Tamborilero: Nueve días antes de la celebración de la fiesta, el tamborilero realiza a diario un novenario consistente en visitar las casas de los hermanos cofrades. En su recorrido interpreta con la gaita y el tambor el Pasacalles y un fragmento de la danza.
La indumentaria del tamborilero se resume a pantalón negro y camisa blanca. Un chaleco sin mangas y una faja atada en la cintura.
La Fiesta: Comienza cada año el treinta de agosto, cuando el tamborilero realiza su particular novenario visitando las casas de los hermanos cofrades, a la vez que se celebra en la Iglesia de Santa Catalina la novena a la Virgen.
El día seis de septiembre se celebra el Rosario, cuyo sentido era el recorrido por los hogares de los hermanos impedidos. Hoy día se resume al canto de la Salve de la Virgen en las puertas de las casas de los hermanos a los que se visitan.
El día siete de septiembre es el último día de novenario. Finalizados los cultos correspondientes, en la plaza de Santa Catalina se organiza la tradicional verbena, que es amenizada por una Tamborada, y en la que se subastan los regalos donados por los devotos de la Virgen.
Ya de madrugada y antes de la Misa de Danzaores el Mayordomo y resto de directivos, acompañados de los hermanos cofrades que se van sumando a ellos, desfilan al toque de Alborada por las calles de Fregenal. El recorrido finaliza en la Iglesia de Santa Catalina, donde se celebra la Misa de Danzaores o misa del Alba, en la que los danzantes ofrecen el primer baile a la Virgen.
Una vez terminada la misa, sobre las ocho de la mañana, el grupo de danzaores, encabezados por los miembros de la hermandad y acompañados por el tamborilero inician su peregrinaje por las calles de la población, invirtiendo gran parte del día en la visita de nuevo a las casas de los más de seiscientos hermanos.
Sobre las siete de la tarde, y después de un breve descanso comienza la procesión de la Virgen de la Salud, que es acompañada por varios grupos generacionales de Danzaores.
Leyenda de la Virgen de la Salud: Según la historia la imagen es proveniente de la antigua villa de Valera donde recibía la denominación de Virgen de la Encarnación. Una vez fue destruido su santuario fue trasladada a la Iglesia de Santa Catalina, en Fregenal de la Sierra. Una vez en la localidad llegó la peste a la villa donde se pidió a la Virgen que salvase al pueblo de tan terrible plaga. Así ocurrió y desde entonces a la imagen se la llama Virgen de la Salud, gracias al milagro obrado por ella.
Fuente: Turismo de Fregenal
Seguidamente podéis ver unas fotos tomadas en Fregenal, durante la Procesión, al atardecer de hoy.
-Podéis ver la imágenes en mayor tamaño "pinchando" sobre la foto-
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Nuevo Estandarte de Ntra. Sra. de la Salud (2024) |
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La imagen:
La preciosísima Imagen de Nuestra Señora de la Salud es una talla en madera policromada de vestir o de candelero. Tiene ojos de cristal y cabellera artificial.
Sobre el costado izquierdo del pecho de la Virgen, reposa la Imagen del Niño Dios, una bellísima talla con ojos de cristal muy similar a los magníficos angelitos que se conservan en la Capilla de la Virgen de la Salud y que antaño complementaban las andas procesionales de la Santísima Virgen. En su mano diestra porta la Señora un cetro de poder y su mano izquierda, sostiene a la Imagen de Dios Infante.
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Virgen de la Salud - Fregenal (jC 18-5-2024) |
Como curiosidad, la Virgen de la Salud, tiene en la base del candelero, dos pies o mejor dicho, dos zapatos de color oscuro que sobresalen por debajo de la saya y las enaguas y que suelen quedar medio ocultos por la Luna de Plata. Éstos zapatos, podrían ser como aseguran algunos entendidos en la materia, una signo diferenciador o identificativo del autor de la obra, a día de hoy, desconocido.
La Imagen de la Santísima Virgen de la Salud que hoy veneramos, es posiblemente una talla del Siglo XVIII que ha sufrido diferentes restauraciones que han alterado su encarnadura, su altura e incluso la inclinación de su cabeza. Sin embargo, las primeras referencias documentales de la Imagen las encontramos a principios del Siglo XVII lo que nos hace pensar, que existió una talla anterior cuya altura podría corresponder con unas viejas enaguas de tamaño notablemente inferior, que custodia la Hermandad.
Igualmente, existe en la Parroquia de Santa Catalina Mártir, un niño de Dios, con los orificios propios de haber sido venerado sobre otra Imagen, conocido como "el Niño Antiguo de la Virgen de la Salud" y que se suele exponer durante los días de Navidad para su veneración.
Éste niño, posiblemente ejecutado en madera entre los siglos XVI y XVII es de dimensiones inferiores al Niño actual que se venera junto a la Virgen de la Salud, teniendo la peculiaridad de tener los ojos azules, y que podría corresponderse con el Niño de la Imagen anterior de la Virgen.